¡Al fin!
Finalmente se habla de lo importante y trascendental para nuestros pueblos. Alberto Fernández y Lula da Silva se reunieron en Brasil y definieron los ejes de la agenda regional: que nunca desarrollaron otros presidentes.: desarrollo energético y la moneda única. El sociólogo Emir Sader, hombre cercano a Luna, aventuró que Brasil sumaría sus reservas en un Banco Central Suramericano. Esa es la cuestión.
Por Pablo Sartirana y Victor Ramos
El presidente argentino Alberto Fernández y su par de Brasil, Luiz Inácio “Lula” da Silva, se reunieron en San Pablo donde avanzaron en las conversaciones para lograr una mayor integración. Fernandez confirmó que Lula visitará Argentina antes de acceder a su cargo el 1 de enero. “Me dio la gran alegría que la primera visita será a la Argentina antes de asumir. Lo destacado del ecuentro es que por primera vez se hace público la idea de una moneda única por dos mandatarios y socios cleves del Mercosur.
“Hablamos del ingreso al grupo de los BRICS, Lula ya lo sabía pero reafirmamos nuestra intención en ese sentido. También del nuevo reordenamiento mundial. América Latina tiene una enorme importancia para el mundo en este sentido. Tenemos alimentos, litio, gas, cobre que podemos brindar a quienes lo necesiten”. Luego agregó que hay posibilidades de reflotar la idea de que el gasoducto Néstor Kirchner pueda extenderse hasta Brasil.
El apretón de manos entre el brasileño Luiz Inacio Lula da Silva y Alberto Fernandez en Sao Paulo. REUTERS/Carla Carniel
Relanzar la relación bilateral, ampliar la integración regional en el marco del Mercosur, la situación internacional debido a la guerra entre Rusia y Ucrania, la posibilidad de extender el gasoducto que saldrá desde Vava Muerta y la de crear una moneda única regional sudamericana que evite el uso del dólar en el comercio internacional, son algunos de los temas que abordaron. La de la moneda única es una idea que surgió durante la gestión anterior y que se fue reflotando.
Lula y Alberto Fernández intentarán fortalecer el vínculo entre Brasil y Argentina.
“Puede ayudar mucho en el trabajo que empezamos con (el mandatario de México) Manuel López Obrador, de volver a unir al continente en un momento de la globalización en que las regiones adquieren otros significados”, había manifestado Fernández en declaraciones a radio Perfil antes de partir rumbo a San Pablo. “Lula es un líder como yo no he conocido antes”, enfatizó en esa misma entrevista. Allí, además, expresó su esperanza de que Brasil se sume a la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) para fortalecer los reclamos de la región.
Daniel Scioli, embajador argentino en Brasilia, entre los presidentes Alberto Fernández y Lula da Silva.
En cuanto a los alimentos, Sudamérica produce el 55 % de la soja del mundo, sin embargo su precio internacional se rige por la bolsa de Chicago en Estados Unidos. En este sentido, América Latina necesita fijar los precios de sus alimentos (no sólo de la soja, sino también del trigo) a través de una Junta Latinoamericana de Granos que establezca precios de referencia. Con respecto al litio, la creación de una “OPEP del Litio” entre Chile, Argentina, México y Bolivia podría generar condiciones favorables de comercialización en el contexto internacional. Por último, la homologación de títulos profesionales entre países del Mercosur significaría un avance importante hacia la creación de una ciudadanía común. Alberto y Lula compartirán indiscutiblemente once meses de gobierno y deberán tomar medidas de integración que no tengan marcha atrás.