Argentina en los BRICS. Por Horacio Paccazochi

El próximo 22 de agosto comienza, en Johannesburgo (Sud África), la reunión del nucleamiento a nivel mundial denominado BRICS por la iniciales de los países fundantes del mismo (Brasil, Rusia, India, China, Sud África), con la presencia de los presidentes respectivos, salvo el caso de Vladimir Putin que por estar Sud África asociada a la Corte Internacional Penal ( una especie de VAR que mira solo para el equipo de EEUU y Europa) le impediría asistir a esta por haberlo condenado por delitos de “lesa humanidad”, pero lo hará vía video conferencia.

Hace falta aclarar que este no es un agrupamiento más de los tantos que el mundo se ha dado a lo largo de las relaciones diplomáticas entre los países. En primer lugar se construye en un momento de inflexión en las relaciones internacionales, en donde luego de la caída del muro de Berlín la alianza de EEUU con Europa se encargó de “disciplinar” al planeta a una forma de comerciar, bajos sus condiciones so pena de ser desfinanciados o incluso ser presionados militarmente.

Mientras Medio Oriente sufría agresiones militares de la entente EEUU-OTAN, América Latina sufría por los planes de ajuste de la banca mundial hegemonizada por esta alianza, que dejó de prestar con fines productivos para hacerlo de forma especulativa.

En este marco se fueron produciendo asociaciones defensivas a estas políticas como la Organización de Cooperación de Shanghái en Asia, o MERCOSUR, CELAC, UNASUR en América Latina. En todas ellas campea la idea de una nueva forma de relacionarse entre los países, en donde más allá de los sistemas de gobierno o ideologías, prive el poder comerciar en paz, sin presiones y donde se respete el interés nacional de cada uno.

Como síntesis de este proceso surgen los BRICS, además con un nuevo ingrediente cual es la tentativa de generar un nuevo tipo de moneda de intercambio que escape al “corral” del dólar y respaldada por un distinto tipo de banca que compita con el FMI, constituido en una dependencia financiera de los EEUU.

Su fortaleza de arranque se da en el hecho de que estos cinco países fundadores de BRICS son poseedores del 31,5 del PBI mundial, en comparación el G7 (EEUU, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia, y Canadá) que representa el 30,7 del PBI mundial. Además los BRICS nuclean el 40% de la población mundial dato nada despreciable desde el punto de vista de la proyección del comercio en un mundo en constante evolución.

Recientemente en reuniones previas de sus integrantes fundadores se ha indicado que se ampliarían en cinco o seis países su conformación de una lista de 30 aspirantes. De todos ellos Argentina estaría a la cabeza por moción de India, China, y Rusia que ven con agrado su incorporación. Sud África no se ha expedido todavía y Brasil lo ha hecho positivamente a través de Lula, con ciertas reticencias de la cancillería de Itamaraty que como siempre quiere que América Latina hable a través de ellos y ve en Argentina representando a la América hispano parlante su contrapeso. De todas maneras creemos que privaran los intereses comunes y los comerciales que ponen a Brasil como nuestro principal socio seguido de China, EEUU, a los que se agrega India con un intercambio con nuestro país en 2021 de 5.600 millones de dólares y con proyecciones netamente ascendentes. Cabe aclarar que este nuevo jugador en el comercio mundial ha establecido fuertes relaciones también con nuestro país en el plano científico- militar en donde se destaca la cooperación entre FADEA, nuestra fábrica de aviones, y HAL ,el gran complejo aeronáutico y militar indio, cooperación de la cual esperamos, de mantener el gobierno argentino un rumbo nacional, muy positivos adelantos en la materia.

Argentina no en vano como decíamos encabeza la lista de preferidos para integrar los BRICS. El País se ha constituido a partir de los descubrimientos de grandes yacimientos de hidrocarburos líquidos y gaseosos en un importante futuro jugador en el mercado mundial de energía. En un mundo occidental que entra en crisis energética porque Europa cortada su relación con Rusia y por ende su provisión de petróleo y gas, en donde las “ideologías verdes” le han hecho renunciar a la energía nuclear en Alemania, aparejado con las caídas de las reservas comerciales de petróleo de EEUU, por todo ello Argentina es considerada un buen socio en este camino hacia un nuevo orden mundial.

Si a esto le sumamos los yacimientos de minerales sin explotar suficientemente todavía, sobre todo los de minerales estratégicos como el Litio y Tierras Raras, esto explica la importancia que asume el país para los BRICS.

De todos modos creemos que si bien hay un mundo nuevo que alumbra, el multilateralismo debe ser nuestra política internacional, la política más importante según el Gral., Perón). El interés nacional debe privar por sobre cualquier acercamiento político o ideológico.

En la medida que privilegiemos como políticas de estado el avance científico-tecnológico, el desarrollo integral del país, y las mejores condiciones de vida de nuestra población encontraremos más y mejores socios primero en nuestro continente y luego en el mundo.