Mercosur: bolsa de cereales común
¿Por qué deberíamos seguir rigiéndonos por el precio que se fija en los Estados Unidos cuando quienes producimos 55% de la soja del mundo, somos nosotros?
Por Alejandro Karlen
La creación de un mercado bursátil cerealero y oleaginoso del Mecosur permitirá la adopción de un índice de referencia para la producción agropecuaria de la región independiente de la cuestionada Bolsa de Chicago. Hemos dado el inicio al proceso de creación de la Bolsa de Cereales del Mercosur.
¿Porque deberíamos seguir rigiéndonos por el precio que se fija en los Estados Unidos cuando quienes producimos 55% de la soja del mundo, somos nosotros?
La puja comercial está produciendo una gran volatilidad y desajustando la relación entre el mercado de Chicago con nuestros productos cerealeros en la región. El contexto generado entre Estados Unidos y China ya beneficia al poroto de soja argentino y a la región del Mercosur. Esto nos indica que resulta inconveniente depender del mercado de Chicago como referencia en las cotizaciones de nuestros los granos.
La República Popular China dejó de comprar poroto de soja a Estados Unidos por los aranceles del 25 por ciento que impuso Trump a las exportaciones a ese país y el gigante asíatico se inclinó a adquirir en Argentina y Brasil.
Hemos dado el inicio al proceso de creación de la Bolsa de Cereales del Mercosur, con la presentación de este proyecto en el PARLASUR. Esto implica la posibilidad de avanzar en un ámbito comercial propio para los cereales de nuestros países. Se trata de la necesidad de contar con la transparencia necesaria que refleje la realidad de los países miembros con el mercado mundial.
El asunto ha resurgido producto del nuevo escenario internacional y el enorme impacto en todas las cotizaciones que se determinan en Chicago, Estados Unidos.
Como antecedente se han realizado pruebas piloto sobre la posibilidad de avanzar con este tipo de contratos o contextos, con entidades vinculadas directamente a la actividad tal es el caso del ROFEX y MATba que son los dos principales mercados institucionales en los cuales se negocian contratos de futuros y opciones sobre activos financieros y commodities, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), el UFEX (Uruguay Bolsa de Valores y Futuros S.A), Bolsa de Valores, Mercaderías y Futuros (BM&F Bovespa), otras bolsas sudamericanas, Puertos del Up-River que es una zona fluvial en la Argentina, que se caracteriza por reunir los principales puertos exportadores de granos (oleaginosas y cereales) del país, el Puerto Nueva Palmira, Puerto de Paranaguá y otros puertos regionales.
Es notorio que en los últimos años la participación de EEUU en la producción de soja y las exportaciones se ha reducido sustancialmente, no obstante el mundo sigue utilizando CBOT (Bolsa de Chicago) como mercado de referencia. Sin embargo ya son poco representativos sus valores a nivel mundial y se han generado impactos negativos en los consumidores y productores que utilizan sus futuros como instrumento de cobertura comercial. Sus precios refleja la realidad estadounidense más que la oferta de los productores sudamericanos y la demanda mundial.
El instrumento que utilizan cuando en los Estados Unidos disminuyen las reservas de oleaginosas y se contrae la cantidad utilizable para vender, es racionar los existencias disponibles, elevando el precio del mercado a término estadounidense.
No obstante tanto Paraguay, Brasil, como Argentina poseen mercadería suficiente y volumen, es entonces cuando los operadores se ven obligados a tener que efectuar enormes descuentos a los precios que se aplican en el norte. Este es el motivo por el cual esta iniciativa adquiere una relevancia significativa.
El objetivo principal de este tipo de ámbitos comerciales es una mayor representatividad de la situación regional, que involucra a Brasil, Argentina, Uruguay , Bolivia y Paraguay. Cabe señalar que este operatividad no se contrapone necesariamente a los futuros de granos estadounidenses, sino que podría permitir arbitrajes entre ellos y los cereales de Sudamericana.
A modo de ejemplo en el año 2018 en la semana del 21 de septiembre, por la “guerra comercial” de Trump el precio de la soja Mercosur alcanzó un diferencial récord de 90 U$S la tonelada contra el poroto norteamericano. No obstante, la referencia mundial sigue siendo el CBOT, el Chicago Board of Trade que se fundó en 1848 y es el mercado de futuros y opciones más antiguo del mundo, propiedad del CME Group, con oficinas centrales en Chicago, Illinois y una filial en Kansas City, en Estados Unidos.
La producción estimada en 188 millones de toneladas de soja que genera el Mercosur (Brasil, Paraguay y Argentina) sobre una producción mundial de 340 millones de toneladas (110 millones, Estados Unidos) lo que demuestra lo conveniente de nuestra propuesta para lograr la independencia en los valores sobre lo que ocurre en USA.
¿Porque deberíamos seguir rigiendonos por el precio que se fijan en los Estados Unidos cuando quienes producimos 55% de la soja del mundo, somos nosotros?
Se presenta la posibilidad de lograr la independencia referencial en los commodities agrícolas.
El Mercosur tiene una mayor área sembrada con soja que Estados Unidos, porque en el mundo se siembran cerca de 117 millones de hectáreas con soja. Estados Unidos siembra con este cultivo 33,6 millones de hectáreas, en tanto que los cinco países sudamericanos implantan en conjunto 56,5 millones de hectáreas con soja. El bloque sudamericano tiene a su cargo el 48% del total mundial sembrada con soja, en tanto que Estados Unidos apenas alcanza al 29%.
También la industria oleaginosa de los cinco países sudamericanos tiene una mayor capacidad de trituración que la norteamericana. Ya que la totalidad de las fábricas aceiteras de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia están en condiciones de producir diariamente 371.000 toneladas de semillas oleaginosas, principalmente soja y girasol.
La industria oleaginosa argentina es líder en el Mercosur y actualmente estaría superando a Estados Unidos con una capacidad de procesamiento del orden de las 206.931 toneladas/día de semillas oleaginosas.
Paraguay produce al año entre 9 y 10 millones de toneladas de soja; Brasil, 114 millones y la Argentina habitualmente unos 50 millones contra los 110 de Estados Unidos. Esto plantea que si existiera un mercado latinoamericano con compradores del exterior y empresas exportadores locales pueden llegar a surgir precios de referencia. Mientras tanto el mercado a Término de Rosario (ROFEX) y el Índice Bovespa compuesto de unas 50 compañías que cotizan en la Bolsa de San Pablo están atados a Chicago.
El desacoplamiento que hacíamos referencia al principio tiene indicadores como por ejemplo el Uruguay no cuenta con un mercado concentrador de las operaciones agrícolas, como el MATba o el ROFEX, pero que tiene la Cámara Mercantil de Productos del país, que publica los precios de referencia que emergen de las comisiones de información de precios integradas por representantes de las entidades gremiales y que las herramientas más habituales de compraventa de los productores uruguayos, en el caso de ventas a futuro, son los contratos forward, es decir contratos que se pactan entre productor y exportador.
No resulta distinta la situación de Brasil donde existen dos canales de mercado para la soja. En primer lugar, está el canal que utiliza el productor agropecuario, más conocido como mercado de mostrador, consistente en entregar los granos cosechados a un centro acopiador, que puede ser una cooperativa, comerciantes o industria; para 2011, sólo el 5% de los agricultores brasileños tenía capacidad de almacenaje propia un segundo nivel, se encuentran las transacciones entre empresas; es decir las cooperativas, acopiadores o industrias que venden a otras industrias o a la exportación, este canal se conoce como mercado de lotes.
La historia nos dice que en los últimos 150 años ha sido Chicago el referente mundial de los compradores y vendedores a lo largo del mundo. Son cantidad de cientos de miles de toneladas y grandes brokers que se mueven con grandes volúmenes de productos agrícolas en el CBOT. La gravedad de la situación movilizó a grupos como CME Group que es el mercado de derivados más importante y más diverso del mundo evalúa lanzar nuevos contratos de soja brasileña en momentos de del resurgimiento de las tensiones comerciales están perturbando el precio de la oleaginosa. También SP Global Platts, el servicio de información de materias primas , empezó a publicar las evaluaciones de los precios de la soja en los puertos de Paranaguá y Santos.
Todos estas referencias nos indican cual es el camino para continuar trabajando en nuestra propuesta que significa una oportunidad ante la amenaza comercial que se da en un contexto de reestructuración del comercio agrícola mundial que viene acompañado por la irrupción de las nuevas tecnologías y la consolidación de la comercialización de granos en un ámbito bursátil regional.
Por eso resulta ineludible destacar que la relevancia de la constitución del Mercosur reside en que somos el proyecto de integración latinoamericana más importante de la actualidad y hemos transitado ese camino desde 1995. Por eso estamos convencidos que la asociación con Brasil, Uruguay y Paraguay debe concebirse como una alianza estratégica en busca de un desarrollo regional y competitivo frente al mundo.
Una nueva fuerza para revitalizar el proceso de integración de América Latina está en marcha y se vislumbra la posibilidad de asociar a las tres economías más grandes de América latina (Brasil, México y la Argentina) que juntas aglutinan casi el 82% del producto bruto de la región.
El Mercosur es la génesis del continentalismo sudamericano de Juan Domingo Perón, que nos dijo en un discurso de 1953, que la política internacional que no se funda en la vida de los pueblos no sirve para nada. Muchos años después, el Presidente Cardoso, lo definió como el acontecimiento de una “reafirmación de la propia identidad de la América del Sur como Región”, donde la democracia y la paz abrían la perspectiva de una integración, cada vez más intensa. El gran pensador uruguayo, Alberto Methol Ferré, nos ilustraba esta parte de la historia en la lucha por construir los poderes intrínsecos, el Mercado Común anunciado entre Argentina y Brasil para 1995 fue el acontecimiento más grande de la historia de América Latina desde su independencia en el siglo XIX.
* Diputado argentino en el Parlasur. Presidente de la Comisión de Asuntos Económicos financieros comerciales, fiscales y monetarios del Parlasur.
Fuente: Perfil.com