Un burro con hijos perros. Por Horacio Paccazochi
Pareciera una historia de ciencia-ficción, pero lamentablemente es la realidad del candidato más votado de las Paso.
Dejamos de lado a los pobres canes que no pueden decidir que padre pueden tener. Pero Milei como cualquier ser humano puede tener más o menos educación e información, eso no lo hace menor persona. Pero cuando teniendo todo lo necesario como lo debe tener un candidato a Presidente de la Nación y dice desconocer la realidad de cuestiones vitales del Estado argentino es un burro.
No hablaremos aquí de sus burradas en economía, escondidas bajo una verborragia de “doctrinas económicas austriacas”, tal vez para esconder la verdadera escuela económica que él dice que va a aplicar, si es gobierno, que no es otra que la de los “maestros” Adalbert Krieger Vassena, Alsogaray, Martínez de Hoz, y Cavallo una pléyade de fracasados que llevaron al país a esta situación.
No, no hablaremos de la última burrada producida ayer en el programa de La Nación+, en donde invitado por Jhonatan Viale se puso a eliminar en la pizarra casi todos los ministerios actuales. Dejaremos de lado este lastimoso acto donde el periodista y Milei parecían jugar a los barquitos hundidos tachando sectores vitales del Estado argentino como si en aras del famoso “déficit fiscal cero” se pudiera minimizar la importancia de la educación, la salud, las obras públicas, la ciencia y tecnología que es a lo que nos queremos referir.
Llegado a este ministerio y ante el asombro del “agorilado” periodista el candidato propuso eliminar el Ministerio de Ciencia y Tecnología, CONICET incluido, pues dijo desconocer lo que allí se producía.
Si hacía falta mejor definición de la vuelta a una argentina pastoril, dependiente y compradora de la tecnología que nos quieran vender del extranjero ésta es.
Si algo se hizo bien en estos últimos años de gobiernos peronistas fue justamente el impulso de la ciencia y tecnologías aplicadas como las vacunas, el apoyo y coordinación con las empresas del área como INVAP, ARSAT, CONAE, CNEA, con desarrollos en tecnología satelital, nuclear, la cohetería, los desarrollos y complementación con las Fuerzas Armadas, la raradización del país, llegando incluso a exportar algunos desarrollos, y también a ahorrar divisas al país de los que aquí se producen. Simplemente y a modo de ejemplo mencionaremos que una investigadora del CONICET, Vanina Martínez, está considerada una de las diez promesas mundiales en el campo de la Inteligencia Artificial.
Esta es la realidad de la ciencia y tecnologías aplicadas en el país. Podríamos decir que tal vez habría que insistir más en el CONICET con la investigación de áreas científicas y menos de Ciencias Sociales pero ese es otro cantar.
Aquí no hay gasto del Estado, aquí hay inversión en materia gris que ya está produciendo resultados con reconocimiento mundial e ingresos. Un satélite Arsat es hoy imprescindible hasta para la “argentina pastoril” que quiere Milei pues mide humedad del suelo, hidrología, clima, vigilancia del ambiente, cartografía, etc., datos imprescindibles para mejorar los cultivos.
A esta altura de la narración debemos rectificarnos sobre la apreciación del candidato. No es burro, es peor, se hace el burro ante la falta de argumentos para dejar al estado nacional desnudo, raquítico, imposibilitado de producir políticas en pos del desarrollo nacional.
No les importa, con el cuento de reducir el gasto del Estado, quieren aumentar el grado de dependencia del país.