El golpe del 24 de marzo de 1976 fue un inmenso dolor de millones e hipocrecía de algunos
Por Horacio Paaccazochi
El golpe civico-militar del 76 represento un gran retroceso social y politico del pueblo argentino. Si bien ambas partes de la grieta que divide a la politica, no al pueblo, lo condena por distinta razones ambas estan impregnadas de hipocresia.
Asi quedamos con juicio y castigo para los militares golpistas y nada para los civiles que participaron y fueron funcionarios del mismo, como podria pasar si en su mayoria eran radicales y el tribunal que a posteriori los juzgo del mismo partido.
El kichnerismo es el responsable, por el otro lado de la “grieta” por haber entronizado a Alfonsin como el “padre de la democracia”. El alfonsinismo fue el reducto donde se cobijaron los restos de la fracasada izquierda antinacional como hoy lo hacen en el kichnerismo que asume el lenguaje y las posiciones de esa izquierda historicamente antiperonista.
Solo se condena al terrorismo de estado, pero la otra pata del golpe del ´76 como fueron los partidos de oposicion a Isabel y el terrorismo de izquierda han salido sin culpa y hoy se pavonean como “democratas” o “luchadores populares”. Mas que declaraciones rimbombantes hay que leer los diarios de la epoca y ver quien era quien. “Luchadores populares”, “juventud maravillosa” las conducciones de los grupos terroristas ¡Hijos de Puta!, que al mismo tiempo que conducian a un sector de la juventud argentina a una tragedia asesinaban a la cabeza de la reaccion popular que surgio del Cordobazo como lo era la dirigencia sindical peronista. Dirigencia esta que fue la verdadera resistencia a todo los antipopular que vino desde el 55 para aca. A Vandor lo matan cuando se aprestaba, con la fuerza de las movilizaciones populares atras, a arrancarle a la dictadura de Ongania elecciones y la vuelta de Peron. Y luego con el regreso del general a Rucci quien era su puntal en el Movimiento Obrero. Esto sin nombrar a la cantidad de dirigentes gremiales asesinados, y sindicatos destruidos por conducciones de izquierda antiperonista haciendole el juego a las empresas como fue el delirio del sindicalismo “clasista” .
Asi han pretendido y persisten en escribir la historia dividiendola entre buenos y malos, civiles y militares.
Con estas posiciones nadie puede convocar a las mayoria nacionales para sacar al pais del pantano . No se puede falsear la historia y acomodarla a una ideologia, como diria Jauretche intentan acomodar la cabeza al sombrero y no el sombrero a la cabeza.
Hoy la politica argentina no representa la verdad historica y al ciudadano de a pie, que esta ausente de las grandes desiciones . Economistas y doctores pululan por los canales de TV, mientras trabajadores, empresarios Pyme y organizaciones del pueblo estan ausentes de ellos y de las listas de candidatos.
El 24 de Marzo de 1976 solo fue otro episodio, desgraciado pero episodio al fin, de este largo transcurrir de la sociedad argentina por reencontrarse con su historia tan manoseada, distorsionada y falsificada por posiciones antinacionales sean estas de derecha o de izquierda.