Lula da Silva, entre Estados Unidos y China, como “Doña Flor y sus dos maridos”

Sobre el equilibrio de Brasil entre los dos principales polos del poder mundial

Por Diego Guelar*

A diferencia del personaje creado por la pluma genial de Jorge Amado -una viuda que mantenía una relación viva con su marido muerto y otra con un boticario de su pueblo- el presidente de Brasil Lula da Silva tiene una relación simultánea y dinámica con los 2 grandes polos del poder mundial: Estados Unidos y China. Ambos estan “vivitos y coleando”, operando muy activamente en todo el mundo y compitiendo por la hegemonía mundial.

Eramos pocos y parió la abuela….en el medio del conflicto que caracteriza al siglo XXI, el autócrata ruso -Vladimir Putin- lanza la sangrienta ocupación de Ucrania. Pero esto no es una guerra sino una batalla del conflicto central que, ademas de afectar directamente al pueblo ucraniano, impacta en los precios internacionales de alimentos y la energía.

Mientras tanto, los 2 grandes protagonistas, EE.UU. y China, se posicionan de uno y otro lado de los contendientes -Rusia y Ucrania- en forma diversa: Washington y sus aliados de la OTAN -la Union Europea- aprovisionan a Ucrania con armas defensivas -no le envían ni misiles de larga distancia ni cazas que le permitirían atacar al agresor en su territorio- para frenar a Putin, pero no para extender el conflicto.

China, por el otro lado, se mantiene formalmente neutral, y propone un plan de paz, pero desde una perspectiva claramente posicionada del lado ruso, a quien considera su aliado cercano.Lula y Xi Jinping en Beijing, la semana pasada. Foto Reuters

Brasil potencia

En este escenario, Brasil se presenta como una potencia mediadora y asi se lo comunica a sus socios principales.

Brasil es uno de los “principales aliados extra-OTAN de los EE.UU.” y tiene a China como su principal socio comercial -un intercambio anual de u$s 150.000 millones y un superávit brasilero de mas de u$s 30.000 millones- mientras que Rusia es su mayor proveedor de fertilizantes. Los otros 2 son China y Bielorrusia. Esos fertilizantes son vitales para suplementar la capacidad del suelo brasilero y su millonaria producción agricola que, con el mineral de hierro, son sus productos principales de exportación.

Brasil -y Lula en particular- ya intentó mediar en el 2010 en el conflicto entre los EE.UU. e Irán. Tal gestión no prosperó. Nada indica que ahora su intento tenga mejor suerte.

Polémica​

Washington ha expresado su disgusto por este posicionamiento brasilero, expresado por Lula durante su visita a Beijing y con un cruce de viajes -su asesor principal, Celso Amorin a Moscú y la visita del canciller Serguei Lavrov a Brasilia- que han levantado una gran polvareda.Vladimir Putin, cuando era primer ministro de Rusia, con Lula da Silva, en mayo de 2010. Foto AP

Para nosotros, los argentinos, que claramente nos hemos pronunciado unánimemente en contra de la Invasion Rusa a Ucrania, no podemos hacer otra cosa que desearle la mayor de las suertes a nuestro vecino y socio estratégico en su intento pacificador (más allá de la posibilidad que prospere) que siempre es loable.

Recordemos que Argentina es tambien “principal socio extra OTAN de los EE.UU.” y tenemos a China como nuestro principal socio agro industrial.

Frente a los nuevos desafíos geopolíticos que nos plantea el siglo XXI, brasileros y argentinos deberemos aprender a enfrentarlos en forma equilibrada, interpretando con sensatez nuestros intereses regionales y nuestra responsabilidad de aportar a la paz y al progreso global.

*Ex embajador argentino en Estados Unidos, la UE, China y Brasil.

Fuente: Clarín

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