Canciller Mondino y la vuelta al macartismo. Por Horacio Paccazochi

“La gran diferencia entre nuestro mundo cristiano y el mundo comunista ateo no es política sino moral” decía por entonces, (1953), en un mensaje al pueblo norteamericano el senador demócrata Joseph McCarthy, (sepa el lector comparar con los discursos de Milei en la actualidad).

Dicho senador desato por aquellos años, siendo sub secretario de investigaciones del senado de EEUU, una paranoica “caza de brujas” que incluía periodistas, miembros de las Fuerzas Armadas, actores de Hollywood, hasta el presidente Eisenhower. El mismísimo Oppenheimer el padre de la bomba atómica fue alcanzado por sus denuncias. Por su conducta impropia de acusar sin pruebas fue finalmente destituido.

Volviendo a nuestro desconcertante presente en materia de política exterior, escuchamos hace pocos días, en una entrevista en TN, a la Canciller Diana Mondino referirse a que el país sufre por estos días una injerencia de espías y activistas comunistas de Cuba y Venezuela entre los cuales se encontrarían periodistas y distintos militantes políticos. Supone que esto se debería a que “la recompensa por sacar a Javier Milei ha de ser muy grande”. Como única prueba aporta que esto ya sucedió en las manifestaciones de Chile en 2019 donde también habría denunciado “personas extranjeras con habilidades especializadas en desestabilización”.

Bueno vamos por parte y aludiendo a la única “prueba” presentada por Mondino tenemos que decir que el estallido social en Chile que duro entre Octubre de 2019 y Marzo de 2020 se debía al hastió del pueblo hermano por una multiplicidad de factores que van desde el sistema de pensiones (AFJP), educación eminentemente privada al igual que el sistema de salud, hasta reclamar una nueva Constitución por nombrar solo algunos. Difícilmente los “agentes extranjeros” que denuncia Mondino, por más entrenados que estuvieran, habrían logrado la movilización de millones de chilenos por sus derechos como realmente aconteció. Por otra parte sería pertinente que la Canciller defina que es comunista, ya que ese término no es utilizado hoy en día ni por los países que alguna vez lo enfrentaron. Hoy el mundo se divide por las estrategias económicas a nivel global que los distintos bloques proponen. Nadie habla, salvo Mondino, de la lucha contra el comunismo. Esto revela el desubique y pobreza intelectual de esta banquera devenida en canciller.

Lo más lamentable de esta “caza de brujas” que nos propone la canciller es que sucede al mismo tiempo que tenemos parte de nuestro territorio ocupado por una potencia extranjera, que actúa militarmente en Malvinas y con inteligencia (no detectada por Mondino) en el continente, que nos embarga cuanta compra de armamento intentamos, y que recientemente acaba de mandar su canciller David Cameron a ratificar sus derechos sobre las islas y ante los cual nuestro gobierno se ha mostrado indulgente.

Mientras esto sucede con el gobierno argentino los presidentes latinoamericanos reunidos en la CELAC, salvo Argentina, han ratificado el pedido de restitución de las Malvinas a nuestro país. Da vergüenza ajena.

Pero ya nada debe extrañarnos de este gobierno de Milei mientras en esa misma reunión latinoamericana se pedía por la paz en Ucrania, desde Argentina se trama una reunión de la región en apoyo a la posición de ese país, lo que es lo mismo que estar a favor de la continuidad de la guerra. Igual cuando medio mundo pide el cese de la masacre del Pueblo Palestino, Milei viaja a Israel para darle su apoyo. Cuando la paz del planeta atraviesa una delicada situación demostramos una tremenda irresponsabilidad al frente del Estado.

La misma irracionalidad y falta de cuidado social con que se maneja el ajuste en el país se aplica a nuestra política exterior. Al igual que en Chile Mondino no serán comunistas los que salgan a la calle en el país a protestar, serán argentinos a los cuales se les prometió que el “ajuste lo pagaba la casta” y lo están sufriendo en su vida cotidiana ahora con la promesa de un “paraíso” dentro 20 años.

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