La maldad y la estupidez III, por Gabriel Sanchez
Macri le puso una gorra a Toto Caputo, que dice: “Las fuerzas del Cielo”, le dio una palmada en el hombro y lo mandó a que acompañe a Milei en su recorrido por Estados Unidos, este viaje místico y económico de Milei, primeramente responde a la certeza autoinfligida de Milei: Que él, a través de las canalizaciones de su hermana,que se comunica con “Conan” y desde ahí Conan habla con algún ser interdimensional de la Escuela de Chicago, Algun Milton Friedman del bajo astral.
Todo esto para entregar el mensaje a Milei, que él y nadie más que él tiene la tarea de reconstruir la patria -o salvarla-, depende del día de canalización de Conan.
A Macri todo esto le viene genial, mientras entrega recursos y empresas estatales para los amigos… Caputo tiene la tarea más terrenal de endeudar (otra vez) a la Argentina, enterrar las investigaciones de la fuga del préstamo tomado por el gobierno del PRO, y volver a repetir lo anterior.
Milei, en su cabeza, tiene la certeza que él va a salvar al país. Delante suyo tiene un papel que dice que el país se va a endeudar otros 100 años, lo mira a Caputo que mueve su gorra y Milei firma. Por estos lados: Macri presiona a Boca y a los jueces para que metan presa a Cristina. Guillermo Franco le cae a la reunión a los gobernadores del PJ. Milei cierra los ojos y repite: “Las fuerzas del Cielo”. Los abre. Trump y Bolsonaro tienen ganas de venir a su asunción.
Una larga alfombra roja – se imagina Milei- Que va desde las puertas del congreso hasta la plaza. Bolsonaro lo saluda, Trump lo aplaude. Macrí ríe. “Las fuerzas del cielo”, repite Milei… El problema es que cuando te metes con las fuerzas del cielo, las fuerzas del cielo se meten con vos.